Hoy os traigo un exfoliante corporal delicioso, y muy hidratante. Es especialmente rico en antioxidantes y fitosteroles, y con el aroma excepcional del increible licor italiano Amaretto.
Os contaré un poquito acerca de este licor:
El amaretto tiene su origen en Saronno, una pequeña localidad cercana a Milán, Italia; de ahí que se lo conoce como amaretto di Saronno. Cuenta la leyenda que en 1525, el pintor Bernardino Luini, discípulo de Leonardo da Vinci, recibió el encargo de pintar un fresco de la Madonna en Saronno. Para ayudarse, Bernardino Luini contó con la ayuda de la hija de la dueña de una posada que le sirvió de modelo. Al parecer pasados los meses la joven se enamoró del pintor y como muestra de su amor y agradecimiento hacia él, le preparó una bebida con productos naturales que tenía en su jardín. Esta prueba de amor fue ofrecida a Bernardino quien llevó esta bebida fuera de Saronno y la dio a conocer por toda Italia.
Respecto a los otros ingredientes que lleva este exfoliante, el aceite de almendras dulces de confiere un alto poder hidratante, y el gengibre y el café le dan un aroma muy intenso, cálido y especiado, muy apropiado para esta época del año.
La esencia de vainilla y el Amaretto, le dan un aroma que dan ganas de comérselo.
Te transportará a tierras italianas sólo con cerrar los ojos!
Ingredientes:
- 1/4 de taza de harina de almendras
- 1/4 de taza de azucar moreno
- 1 cucharadita de gengibre en polvo
- 30 gramos de aceite de almendras dulces
- 5 cucharaditas de café molido
- 1/2 cucharadita de aceite esencial de vainilla
- 1/2 cucharada de Amaretto.
Instrucciones:
- En un bol de tamaño mediano, combinamos el azúcar, la harina de almendras y el gengibre en polvo.
- Después, añadimos el aceite de almendras dulces y el café, y mezclamos bién.
- Ahora, es el momento de añadir la esencia de vainilla y el Amaretto, agitando para que se mezcle completamente.
- Poner la mezcla en un tarro de cristal con tapa.
A disfrutar!!